La policía y la Justicia Federal ya investigan si el detenido, identificado como Pedro Jesús Guerrero Ayala, de 30 años, provenía de la villa 1-11-14 del Bajo Flores donde se produjeron varios hechos que protagonizaron ciudadanos peruanos vinculados al narcotráfico.
El accidente ocurrió cerca del mediodía en el cruce de la avenida Juan Bautista Alberdi y Moreto, a cinco cuadras del Parque Avellaneda, entre un Peugeot 504 y una camioneta Fiat Fiorino.
La colisión derivó en una discusión entre los conductores que fue advertida por efectivos de un patrullero de la comisaría 40 que pasaba por el lugar.
Los dos policías primero notaron que Guerrero Ayala estaba nervioso y no quería entregar la documentación y al echar un vistazo a su auto vieron en el asiento trasero un bolso deportivo abierto del que asomaban los típicos panes envueltos con cinta de embalar donde se empaqueta la droga.
Si bien en un primer momento los policías pensaron que se trataba de marihuana, al abrir los envoltorios comprobaron que era cocaína de aparente máxima pureza.
En total, la policía descubrió en el baúl y el asiento trasero del Peugeot 504 seis bolsones negros y rojos que contenían 173 kilos de cocaína.
El titular de la comisaría 40, comisario Sergio Maldonado, reconoció a Télam que "se trató de un hecho fortuito" pero no dejó de manifestar su satisfacción por el éxito del secuestro de esta cantidad de droga y el desempeño de policías que la detectaron.
"Todo empezó con un choque en el que los dos conductores se bajaron y comenzaron a discutir y en ese momento pasó un patrullero que estaba en prevención y el personal bajó para evitar una pelea", contó el comisario.
Maldonado relató que "el conductor del Peugeot se mostraba evasivo y reticente a entregar la documentación del vehículo y el personal policial observó en el asiento trasero unos bolsos y uno de ellos abiertos y por el tipo de envoltorios que vieron notaron que había algo raro".
El jefe policial explicó que en ese momento los policías convocaron testigos y llamaron a sus superiores.
"Se hizo el 'narcotest' y dio como resultado que se trataba de cocaína pura. La pesamos con una balanza y en total son 173 kilos", agregó el comisario.
Maldonado comentó que ya se está trabajando con Interpol y otras divisiones específicas para chequear la identidad y los antecedentes del peruano detenido.
Fuentes de la División Drogas Peligrosas de la Policía Federal informaron a Télam que Guerrero Ayala vive hace un año y medio en Argentina, en una casa situada en Cobo y Curapaligüe a seis cuadras de la villa 1.11.14, y que no posee antecedentes penales.
La causa quedó en manos del Juzgado Federal 10 de Capital Federal, a cargo del juez Julián Ercolini, que ahora investiga la procedencia y el destino de la droga.
Los investigadores quieren determinar si la cocaína salió del mencionado asentamiento situado frente a la cancha de San Lorenzo y si el detenido tiene relación con las bandas de narcos peruanos instaladas allí.
La Justicia Federal investiga desde hace varios meses el enfrentamiento entre dos bandas de traficantes peruanos -varios de sus integrantes son ex guerrilleros de Sendero Luminoso- a las que se les atribuyen más de 15 asesinatos en los últimos años, la mayoría cometidos en esa villa del Bajo Flores.
Una de las bandas rivales es la que supuestamente lidera Alionzo Rutillo Ramos Mariño, conocido como "Ruti", quien se encuentra detenido acusado de participar de la masacre de peruanos cometida en octubre de 2005 durante una procesión religiosa.
La otra es la encabezada por Marco Antonio Estrada Gonzáles, quien actualmente se encuentra prófugo, mientras su suegra, Lucila "Lili" Enriquez Alarcón, está detenida y procesada como "organizadora" de una banda dedicada a la venta de drogas y al lavado de dinero. (Télam).
