Las autoridades hallaron el cadáver en uno de los salones de la vivienda, que era usada además como sede de la iglesia Buenas Nuevas de Sión, en una barriada del balneario de Cartagena (1.090 Km al norte de Bogotá), tras ser alertados por vecinos que se quejaban de malos olores.
Pulido dijo que su esposo se sintió mal el jueves y murió en la madrugada del viernes. "Él me dijo en caso de que yo muera, no me saques de aquí, porque el señor Jesucristo me tiene que levantar", añadió la mujer, quien dijo que todavía espera se cumpla el pacto.
Autoridades de Cartagena dijeron que pondrán a disposición de la familia ayuda psiquiátrica mientras el cadáver permanece en la morgue local, adonde fue trasladado. (AFP)