En este sentido, afirmó que "la sociedad quiere representantes creíbles, confiables, que no mientan, que no engañen" y sostuvo que si bien hubo este fin de semana un arrepentimiento por parte de Blumberg por no haber aclarado que no era ingeniero, "hay cosas que llegan tarde en la vida".
"Uno puede tener posiciones equivocadas y confundirse, y bienvenidos aquellos que se arrepienten por ello. Pero hay ciertos límites", postuló De Narváez, quien esta tarde anunciará en San Isidro que materializará su postulación a la gobernación bonaerense a través del partido Unión Popular.
Al referirse a la polémica generada en torno a Blumberg, el diputado nacional le cuestionó haber tenido "la impunidad de decir lo que no se es" y sostuvo que, quienes pretenden como él construir lo que llamó una "buena política", no pueden arrancar "con alguien que no ha dicho la verdad o ha engañado".
En este marco, De Narváez destacó la necesidad de "volver a construir la confiabilidad con la gente", señaló que "no se puede tener confianza en quien ha mentido y engañado", y postuló que "la provincia de Buenos Aires necesita gente confiable y honesta".
Así, el candidato a gobernador se sumó a las reacciones que generó en la arena política el tema Blumberg, quien luego de tres días de que circularan versiones que indicaban que no contaría con un título de ingeniero, salió a confirmar esa información y a pedir disculpas a la ciudadanía por no haberlo aclarado antes.