El incremento se cobra en concepto de "servicio de playa", ya que, por ejemplo, en la provincia de Buenos Aires está prohibido por ley el autoservicio de combustibles, con lo que se estaría pagando un plus por el asistencia de tener un playero que despache el combustible.
El presidente de la Confederación de entidades del Comercio de Hidrocarburos y Afines de la Argentina (CECHA), Marcelo Ravesio señaló que la medida tiene como objetivo recomponer la rentabilidad del sector y hacer frente a los reclamos de aumentos saláriales.
La medida, que ya está vigente en Capital Federal y alguna provincias no alcanzará por el momento a las estaciones de GNC, aseguró el titular de Unión de expendedores de naftas y afines (UENYA), Luis Malchiodi.
"Estamos hablando de la continuidad de la fuente de trabajo y de nuestro negocio. Los 15 centavos de aumento van a ser facturados, discriminados y se van a pagar los impuestos que correspondan. Será algo transparente y no hay nada oculto en esto", aseguró el presidente de los estacioneros de la Región”.
Con la aplicación de este ajuste, la nafta prémium pasaría a costar 2,14 pesos, desde los 1,99 actuales, lo que representa un incremento del 7,5%; en tanto que la súper costaría 2,04 contra 1,89 que cuesta en la actualidad (7,9%); la común 1,84 peso desde 1,69 que se cobra hasta hoy (8,8%); mientras que el gasoil pasaría de 1,49 a 1,64 peso el litro (10%), según los precios promedio que se cobran en las estaciones de servicio del Gran La Plata.
El costo varía según la zona
La medida, con el importe que varía de acuerdo a la zona geográfica en que están instaladas las estaciones de servicio, fue bien recibida por los estacioneros del interior del país que comenzaron a aplicar esta tarifa.
Para no incurrir en ninguna anomalía y evitar posibles sanciones o multas, la CECHA recomienda a los estacioneros publicar "en forma clara" carteles con la información correspondiente al cobro de esta nueva tarifa.
Luis Viviant
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