El dispositivo montado para el traslado, técnicamente llamado "tren de remolque", tiene una longitud de un kilómetro en total, incluidos el largo de los tres buques.
El remolcador Libertador lidera el convoy, arrastrando una serie de cables de acero de 350 metros que lo conectan con el Aviso Suboficial Castillo.
"Este último buque posee un guinche de remolque con un regulador automático de tensión desde donde sale una combinación de cables
de acero y cabos (sogas) de perlon (nylon de alta resistencia) de una longitud de 450 metros", agregó el parte de prensa.
La combinación del guinche y el cabo de perlón provee la elasticidad necesaria para absorver las tensiones provocadas en la línea de remolque.
Según se indicó, el rompehielos Almirante Irízar se encuentra a la altura de la boca del Golfo Nuevo, aproximadamente a 100 millas náuticas, unos 180 kilómetros de la costa.
Un vocero naval señaló además que "de mantenerse las actuales condiciones climáticas y de seguridad el rompehielos arribará el fin de semana a la base naval de Puerto Belgrano".
A bordo del rompehielos permanecen su comandante y treinta hombres de diferentes dotaciones de las unidades navales que se encuentran operando en la zona,
Además, personal de la Agrupación Buzos Tácticos y del Servicio de Salvamento de la Armada que suman sus capacidades de rescate y auxilio de personal.
Las corbetas "Robinson" y "Granville" y el aviso "Teniente Olivieri" se encuentran navegando en apoyo del rompehielos, en tanto que el destructor "Almirante Brown", que estaba reaprovisionándose en Puerto Madryn, ya zarpó y navega al encuentro de los buques. (Télam).
