Pero la primera semana de la vidriera grande deja a España y Ecuador en una buena situación ante los ojos del mundo y, naturalmente, la prensa especializada.
Así como un poco antes lo hizo República Checa ante un flojo equipo de Estados Unidos, españoles y ecuatorianos liquidaron a sus rivales con un juego vistoso y muy eficaz.
Ucrania no fue rival para España y el ascendente Ecuador superó con facilidad a Polonia y Costa Rica, al punto que encabeza el Grupo A por diferencia de goles.
Pero deberá enfrentar a una Alemania -tiene +3 contra +5- que corre el riesgo, si no gana su zona, de cruzarse en octavos de final con Inglaterra. No obstante, ya se extrae una primera certeza: el progreso futbolístico del fútbol de Ecuador.
España con un planteo ofensivo y aprovechando una generación de buenos futbolistas, los nacidos a fines de los ï70 y principios de los ï80, soltó a los toros futbolísticos (Puyol, Sergio Ramos, Albelda, Fernando Torres, Luis García) y revivió la mítica furia española.
Y todo bajo la conducción del sabio "Xavi" Hernández, el no muy alto armador del Barcelona, y con dos nacionalizados: el todo terreno brasileño Marcos Senna Da Silva (29 años) que la rompe en el Villarreal y el argentino Mariano Pernía, convocado a último momento.
Ecuador, dirigido por el colombiano Luis Fernando Suárez, un hijo de la maravillosa ciudad de Medellín para los argentinos gardelianos, viene superando su propio complejo: ganar fuera de los 2.800 metros de altura que ofrece el paisaje que rodea a la pintoresca ciudad de Quito.
Con un fútbol muy ordenado, pausado -a la colombiana de la legión del "Pibe" Carlos Valderrama hace quince años- el innegable buen pie de varios nacidos a mediados de los ï70, pero sin tanta juventud como España, Ecuador domina su grupo causando asombro.
A los consagrados como Ulises De la Cruz, jugador del Aston Villa de Inglaterra, o Agustín (el "Tim") Delgado, ambos nacidos en 1974, se han sumado varios futbolistas que juegan en su país natal y muy pronto, cabe pensar, emigrarán al fútbol de las grandes ligas.
Entre otros está Edison Méndez, un "8" que le pega con un 'fierro', Félix Valencia, Edwin Tenorio y los viejos conocidos del fútbol argentino: Neicer Reasco, el lateral derecho que está jugando por izquierda y anduvo por Newellïs hace 5 años e Iván Kaviedes, que estuvo hasta hace poco en Argentinos Júniors.
La historia y la nostalgia llevan a la década dorada de los ï40, cuando Argentina ganó invicto en 1947 el Campeonato Sudamericano, en Guayaquil, y a Ecuador le hizo 12 goles, de visitante y con René Pontoni, Angel Labruna y el popular "Chaplín" Félix Loustau como figuras excluyentes.
(Télam, por José Luis Ponsico).
